Su más profunda indignación mostraron cientos de vecinos de Quillota en una protesta realizada este viernes contra los malos olores que emanan desde la planta de tratamiento de aguas servidas de Esval.

A la manifestación asistieron principalmente los vecinos de El Sendero, Villa Nápoli, Las Viñas y otros conjuntos residenciales del sector más afectado

Hay que recordar que desde hace varias semanas se siente un profundo olor a fecas en gran parte de Quillota, hecho por el que los vecinos culpan a la planta El Molino de Esval, ubicada en paradero cuatro del camino troncal.

Y no fueron solo vecinos quienes asistieron ya que participó el alcalde Luis Mella, el diputado Cristian Urizar y concejales del municipio de Quillota.

«Huele a caca, huele a mierda, estamos cansados todos los vecinos, queremos soluciones, necesitamos ayuda» dijo una de las pobladoras que fue a la protesta.

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