A eso de las cuatro de la mañana se desató en Quillota la anunciada tormenta eléctrica que despertó a la mitad de los vecinos de la ciudad.
Los relámpagos y truenos se dejaron ver una hora antes de la lluvia, que comenzó a caer de forma más intensa a eso de las cinco de la mañana.
El fuerte ruido de los estruendos provenientes del cielo provocaron que la gran mayoría de los perros comenzara a ladrad, despertando a quienes no habían percibido la tormenta.
Poco acostumbrados a este fenómeno de la naturaleza los quillotanos expresaron su preocupación en redes sociales aunque algunos se lo tomaron con humor.